BERLÍN.- Los mayores importadores chinos de GNL están declarando fuerza mayor y están suspendiendo las compras debido a la caída de la demanda causada por la epidemia de coronavirus.
Esto podría arruinar el acuerdo comercial entre Washington y Pekín, ya que los suministros adicionales del GNL estadounidense son un elemento calve del acuerdo suscrito en enero.
El consumo diario de petróleo en China ha caído en un 20% ante el brote del 2019-nCoV, según informó la agencia Bloomberg a principios de febrero. Los precios mundiales del oro negro están cayendo.
Las importaciones de gas licuado están viviendo un momento aún peor. El pasado 6 de febrero la China National Oil Corporation (CNOOC) declaró fuerza mayor y se negó a comprar gas licuado de tres proveedores, según informa Reuters.
No obstante los problemas para China no se detienen ahí, este lunes se reveló que la confianza de inversores en la zona euro cayó en febrero por primera vez en cuatro meses, ante los temores de que el gigante asiático no sea capaz de contener el brote de coronavirus.
El índice Sentix para la zona euro cayó de 7,6 en enero a 5,2 en febrero. El pronóstico de consenso de Reuters era de una baja a 4,1.
La caída, aunque ligera, refleja el hecho de los inversores piensan que el daño económico del nuevo virus ha limitado principalmente a China.
En general, las acciones globales cayeron este lunes luego de que la cifra de muertos por el brote de coronavirus superara a las de la epidemia de SARS de hace dos décadas, pero las bolsas de China subieron porque las autoridades levantaron algunas restricciones al transporte y se retomó la actividad laboral, ayudando a las empresas a ir reanudando las operaciones.