KABUL.- Un enviado estadounidense llegó a Doha y Kabul para presionar a los funcionarios del gobierno talibán y afgano para que inicien unas conversaciones de paz que Estados Unidos espera que le permita retirar sus tropas de Afganistán, dijo el Departamento de Estado norteamericano.
Este lunes, diez personas murieron, incluyendo un terrorista, y otras cuarentena resultaron heridas en un ataque suicida que se atribuyeron los talibanes cerca de una base de las fuerzas de seguridad e la provincia de Ghazni, al sur del país.
En el ataque fue utilizado un vehículo militar robado repleto de explosivos y el objetivo era una base del Directorio Nacional de Seguridad (NDS), la principal agencia de inteligencia afgana, según informó la autoridad local en un comunicado.
El representante especial de Estados Unidos para Afganistán, Zalmay Khalizad, se fue un día después de que el presidente afgano Ashraf Ghani y su rival Abdulá Abdulá firmaran un acuerdo para compartir el poder que podría ayudar a llevar a conservaciones de paz para poner fin al conflicto de más de 18 años en ese país.
Los representantes especiales de Rusia, China, Irán y Pakistán para Afganistán expresaron hoy su beneplácito al acuerdo alcanzado en la víspera entre Ghani y Abdulá, y confiaron también en que este propiciará un pronto retorno al diálogo de paz en el país.
Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, habló con los dos líderes el domingo y les dijo que estaba complacido por su disposición a avanzar hacia negociaciones inraafganas, pero “lamenta el tiempo perdido”.