WASHINGTON.— La Embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe ha emitido un urgente llamado a los ciudadanos de su nación que se encuentran en Haití, instándolos a tomar medidas inmediatas para abandonar el país, dadas las preocupantes circunstancias de seguridad y las limitaciones en la infraestructura.
A través de un comunicado compartido en su sitio web oficial, la embajada ha aconsejado a los ciudadanos estadounidenses que consideren utilizar vuelos comerciales o privados para su salida lo antes posible.
La embajada ha enfatizado que múltiples líneas aéreas están en funcionamiento en los aeropuertos internacionales de Haití, incluyendo Puerto Príncipe y Cabo Haitiano. No obstante, se ha advertido que debido a la alta demanda, los vuelos podrían llenarse rápidamente, lo que podría resultar en una espera de varios días, e incluso semanas, antes de conseguir un asiento disponible.
Para enfrentar esta situación, la embajada ha recomendado a los ciudadanos estadounidenses considerar la opción de reservar sus vuelos con anticipación. Además, ha facilitado una lista de las compañías aéreas que operan en Haití para ayudar en la planificación. No obstante, la embajada ha subrayado la importancia de seguir las condiciones locales y actuar solo cuando la seguridad sea garantizada.
Asimismo, se han compartido directrices cruciales para la seguridad durante los viajes en Haití. Se ha aconsejado evitar concentraciones masivas de personas y, en caso de encontrarse con un control de carretera, dar la vuelta de manera inmediata y dirigirse hacia una zona segura.
El pasado lunes, debido a la escalada de actividad policial y tiroteos en las inmediaciones de la embajada en Puerto Príncipe, todo el personal de la misión diplomática fue confinado en el lugar y en los complejos residenciales hasta nuevo aviso.
La zona que alberga la embajada ha sido objeto de ataques armados recurrentes por parte del grupo conocido como Kraze Baryè, liderado por Vithelhomme Innocent, un influyente líder de banda que ha desafiado en varias ocasiones a las fuerzas de seguridad.
En un contexto en el que las bandas armadas ganan cada vez más poder y control en Haití, infundiendo temor a través de actos de violencia como robos, asesinatos, violaciones y destrucción de viviendas, la situación se torna cada vez más preocupante.