BRUSELAS.— El Banco Central Europeo se mantendrá previsiblemente en la senda de las subas de las tasas de interés para continuar la batalla contra la inflación y pese a las turbulencias de los mercados financieros tras la quiebra del estadounidense Silicon Valley Bank (SVB).
El BCE ha mostrado desde hace semanas su disposición a subir el jueves el precio del dinero en la zona del euro en medio punto porcentual, hasta el 3,5 por ciento.
De este modo, la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero a los bancos a un día, se situaría en el 3 por ciento.
Pero la quiebra del banco californiano SVB, especializado en la financiación de empresas emergentes tecnológicas, ha sacudido a los mercados financieros y despertado el temor de que se produzca un contagio a otros muchos bancos de todo el mundo como ocurrió tras el colapso del banco de inversiones estadounidense Lehman Brothers, en 2008.
El colapso del banco californiano repercutió en todo el sector bancario y en todo el mundo cayeron en picada las bolsas. Los mercados comenzaron a pensar que la agresiva subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal habrían inducido a esta debacle, y de ahí se ha empezado a especular con que el BCE no va a subir hoy sus tipos de interés en medio punto y que podría decantarse por un aumento menor, de un cuarto de punto.
No obstante, la mayor parte de los analistas considera que el BCE mantendrá sus planes de un incremento de medio punto porcentual debido a que no ha ganado la lucha contra la inflación todavía.