ENERGÍA.— El precio del petróleo subió levemente tras cuatro jornadas consecutivas a la baja, mientras los inversores aguardaban señales sobre si el presidente Donald Trump impondrá aranceles secundarios a los compradores de energía rusa, como forma de aumentar la presión sobre Moscú.
El Brent superó los 68 dólares por barril tras perder casi un 8% en cuatro sesiones, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) se acercaba a los 66 dólares. Trump sugirió que impondría aranceles más altos a los países que compran petróleo a Rusia —posiblemente incluyendo a China—, después de anunciar que pronto aumentaría los gravámenes a India.
El enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, llegó a Moscú el miércoles para mantener conversaciones, apenas dos días antes de la fecha límite del 8 de agosto impuesta por Washington para que Rusia ponga fin al conflicto con Ucrania. El Kremlin evalúa ofrecer una posible concesión que incluiría una tregua aérea, aunque insiste en su determinación de continuar con la guerra.
El crudo ha retrocedido en las últimas jornadas tras una racha alcista de tres meses, en medio de preocupaciones sobre los obstáculos al crecimiento en EE.UU., que podrían afectar la demanda de energía, y las recientes decisiones de la OPEP+ de revertir los recortes de producción. El fin de semana pasado, la alianza acordó aumentar la producción a partir de septiembre, lo que intensificó los temores de que la oferta mundial supere el consumo en esta segunda mitad del año.
“La retórica de Trump sobre las sanciones a Rusia y los aranceles secundarios se vuelve más fuerte a medida que se acerca su fecha límite para Putin; por ahora, el mercado la ignora como mero ruido”, señaló Vandana Hari, fundadora de la consultora Vanda Insights. “Habrá un ajuste si y cuando estas amenazas se materialicen, dependiendo del riesgo percibido de una disrupción en el suministro.”
El martes, el crudo cerró en su nivel más bajo desde principios de julio, tras la publicación de débiles datos económicos en EE.UU. que intensificaron los temores de desaceleración. Las cifras mostraron una virtual parálisis del sector servicios el mes pasado, en línea con otras señales de alerta. La semana pasada, se reveló que el mercado laboral fue mucho más débil de lo que se creía.
Por otro lado, las estimaciones del sector petrolero mostraron un panorama mixto respecto a las reservas en EE.UU. Los inventarios de crudo a nivel nacional cayeron en 4,2 millones de barriles la semana pasada, aunque las reservas en el centro clave de Cushing, Oklahoma, aumentaron, al igual que los inventarios de destilados. Se espera que el informe oficial se publique más tarde este miércoles.