WASHINGTON.- La Administración de Joe Biden, que busca que Irán vuelva al acuerdo internacional para frenar su programa nuclear, emitió este martes las primeras sanciones contra altos funcionarios iraníes acusados de violar los derechos humanos.
Las designaciones afectan a Ali Hematian y a Masud Safdari, dos miembros de la Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de Irán, que tendrán prohibida la entra a Estados Unidos por sus responsabilidades durante interrogatorios a detenidos en las protestas de 2019 y 2020. Ese veto también afecta a los miembros de sus familias.
“Hoy el Consejo de Derechos Humanos de Ginebra, expresamos claramente nuestra preocupación por los abusos que el gobierno iraní continúa perpetrando contra sus ciudadanos, incluyendo la detención injusta de muchas personas en condiciones deplorables”, afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, en un documento.
El gobierno de Biden prometió que Estado Unidos volverá a formar parte del pacto nuclear suscrito en 2015 por Irán y las grandes potencias, del cual el gobierno de Donald Trump decidió unilateralmente retirarse.
Ahora, Irán pide al gobierno estadounidense levantar todas las sanciones en su contra que fueron suspendidas gracias a la firma del pacto, pero que Trump restableció a partir de 2018.