LA PAZ.- Con una gran fiesta y muchos invitados, el mandatario boliviano Evo Morales inauguró la Casa Grande del Pueblo. En su discurso el presidente señaló que la construcción de este edificio tiene como objetivo acabar con la condición del Estado inquilino, termino que hace alusión a la falta de infraestructuras para las instituciones públicas.
Según el propio Morales, el Estado gastaba anualmente alrededor de 20 millones de dólares en alquiler de inmuebles para sus ministerios, dinero que se ahorrará con la nueva instalación a la que se mudan las carteras de la Presidencia, Comunicación, Medio Ambiente y Agua, Culturas y Turismo, además de Energía.
Morales aseveró que la Casa Grande del Pueblo también responde a la necesidad de centralizar al Ejecutivo para atender mejor las necesidades de la población boliviana.
El lujoso hogar del líder socialista cuenta con 28 pisos que incluyen un helipuerto, una suite con jacuzzi, sala de masajes y gimnasio. El costo de la lujosa edificación se calcula en unos 35 millones de dólares. La imponente torre sobresale entre las casas coloniales que quedan en el centro histórico de La Paz.
El nuevo despacho de Morales estará ubicado en el piso 26 desde donde una postal irónica enmarca la vista de los barrios más pobres de la capital boliviana apiñados en las colinas de la ciudad.