WASHINGTON.— La Reserva Federal dejó abierta la posibilidad de que los tipos de interés sigan aumentando durante más tiempo con el fin de evitar que se consolide una inflación más alta, incluso asumiendo el riesgo de que eso desacelere a la economía estadounidense.
Los responsables de la política monetaria respaldaron en su próxima reunión en julio el aumento de las tasas en 50 o 75 puntos básicos. Los funcionarios consideraron crucial mantener la credibilidad del banco central para controlar la inflación.
“Muchos consideraron que uno de los riesgos significativos que enfrenta actualmente el comité es que la inflación elevada se afiance si el público comienza a cuestionar la resolución del comité de ajustar la postura de la política, según lo justificado”, revelaron algunos funcionarios.
Los economistas también “reconocieron que el endurecimiento de las políticas podría desacelerar el ritmo del crecimiento económico por un tiempo, pero consideraron que el retorno de la inflación al 2% es fundamental para lograr el máximo empleo de manera sostenida”.
El agresivo intento del banco central estadounidense para frenar la inflación más alta en 40 años convulsionó a los mercados financieros, en tanto que los inversionistas temen que una política monetaria más estricta lleve a la economía estadounidense a la recesión.
La Reserva Federal elevó su tasa de referencia en 75 puntos básicos en junio, la mayor alza desde 1994, subiendo su punto de referencia a un rango objetivo de 1,5% a 1,75%. En ese momento, el presidente de la Fed, Jerome Powell, sugirió que podrían hacer lo mismo nuevamente en julio.
El economista del banco central dijo a la prensa que la posibilidad de otro aumento de 75 puntos básicos o uno de 50 puntos básicos, estaría sobre la mesa cuando los responsables de política se reunieran el 26 y 27 de julio.