PARÍS.— Francia reaccionó con molesta y consternación a las últimas propuestas británicas para hacer frente a la crisis migratoria entre sus costas. Esto intensificó la batalla de voluntades entre los dos países sobre las peligrosas travesías del Canal de la Mancha, que esta semana causaron 27 muertos.
Emmanuel Macron increpó a la oficina del primer ministro Boris Johnson por hacer pública una carta que el mandatario envió al presidente francés el jueves. En particular, Johnson propuso que Francia acepte de vuelta a los migrantes que cruzan ilegalmente el Canal de la Mancha, una idea que Francia descarto rápida y tajantemente.
“Me sorprenden los métodos cuando no son serios”, dijo Macron desde Italia, donde se cuenta de visita. “Uno no se comunica de un líder a otro sobre estos asuntos a través de tuits y cartas que se hacen públicas. No somos denunciantes”.
La carta y la respuesta de Francia fueron el último cruce entre las naciones en lo que se ha convertido en una relación con cada vez más roces entre los antiguos socios europeos. No solo han discutido sobre la migración, sino también sobre sus acuerdos posteriores al Brexit, incluida la regulación de la pesca en aguas donde trabajan barcos británicos y franceses.
El clima de tensión se sumó a los bloqueos de los navíos pesqueros franceses que se planeaba para este viernes y el tráfico bajo el Canal de la Mancha; con el fin de interrumpir el flujo de mercancías a Reino Unido y aumentar la presión sobre Gran Bretaña para obtener más licencias de pesca post Brexit.
La misiva, que fue expuesta en redes sociales, tuvo repercusiones inmediatas y concretas. El vocero del gobierno francés, Gabriel Attal, dijo que la secretaria del Interior, Priti Patel, ya no sería bienvenida en la reunión comunitaria del domingo que tratará el problema de las redes que trafican migrantes. “Estamos cansados de este doble lenguaje”, afirmó.