WASHINGTON.— En la cumbre del G7 en Hiroshima, los líderes de los países miembros definirán un «conjunto de herramientas» para combatir la «coerción» económica de China y limitar los riesgos de las exportaciones de alta tecnología a China socaven la seguridad nacional, según anunció un alto cargo estadounidense.
El asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, explicó que las medidas se centrarán en las cadenas de suministros más resilientes para los países del G7 que dependen fuertemente de China en algunos sectores. El acuerdo incluirá también «pasos para proteger tecnologías sensibles, como controles de exportación y medidas sobre las inversiones en el exterior«.
Sullivan aseguró que se han disipado gran parte de las diferencias pasadas entre Estados Unidos y la Unión Europea sobre cómo lidiar con China. La estrategia común enfatizará la necesidad de proteger a los países occidentales, al tiempo que evita una confrontación directa con China.
«Los líderes del G7 saldrán hoy con una declaración sobre nuestro abordaje compartido en lo que se refiera a la República Popular de China», sostuvo Sullivan. Precisó que incluirá garantías de que el grupo desea «relaciones estables con China y trabajar juntos (con Pekín) en temas de interés mutuo».
Según Sullivan, una diplomacia intensiva desarrollada desde que el presidente Joe Biden llegó al poder en enero de 2021 ha permitido un «alineamiento» del G7 en este tema. «Los últimos dos años y medio creo que han resultado en una convergencia que no veíamos años atrás sobre temas clave (…) Es una política multidimensional, compleja, para una relación compleja con un país realmente importante», precisó.
