LIMA.- Perú defendió su decisión de exigir pasaporte a los venezolanos que ingresen a territorio peruano huyendo de la grave crisis social que atraviesa al país bolivariano, al detectar varios ingresos con cédulas falsas, aseguró el canciller peruano Néstor Popolizio en un encuentro con la prensa.
El canciller aseguró que en “ningún momento está el deseo de las autoridades peruanas y su Gobierno de impedir la migración venezolana a Perú, eso no se les ha dicho y no va a ocurrir. Perú está abierto para recibir a los migrantes venezolanos de forma permanente”, además de asegurar que no está previsto que se inicien procesos de deportación, señaló el ministro durante la conferencia de prensa.
Popolizio aclaró que las medidas anunciadas por su país en los últimos días solo buscan obtener “una migración realmente ordenada, segura y regulada”. Las medidas son “acciones preventivas”, indicó y agregó que “lo que buscamos es rechazar que aparezcan sentimientos de xenofobia hacia los venezolanos”.
La policía peruana detuvo el fin de semana a 18 venezolanos que carecían documentos. Y diez días atrás, cinco presuntos delincuentes de esa nacionalidad fueron sancionados con nueve meses de prisión preventiva.
Según los datos de las autoridades peruanas se calcula que más de 20.000 venezolanos podrían ingresar al país antes de que se comience a exigir el pasaporte.
El canciller no dejó pasar la oportunidad para recordar que el éxodo de venezolanos se produce porque en Venezuela “no hay trabajo, comida y medicinas”. “En Venezuela reina una dictadura, esto genera el éxodo”, insistió.
Las declaraciones del canciller se producen un día después de que una organización de venezolanos afincada en Perú solicitara que se permite el ingreso sin pasaporte de niños, embarazadas, ancianos y enfermos.
La organización asegura que conseguir un pasaporte en Venezuela es un “verdadero lujo”, pues quien lo requiera debe pagar entre 1.000 y 5.000 dólares, aunque el salario promedio mensual no supera los cinco dólares.
