NACIONES UNIDAS.- Cancilleres del Grupo de Lima y otros grupos de países impulsado por la Unión Europea acordaron el lunes que hablarán con naciones que apoyan al gobierno del presidente Nicolás Maduro para que éstas “sean parte de una solución” pacífica en Venezuela que resulte en elecciones.
El Grupo de Lima decidirá durante su próxima reunión el 6 de junio cómo un programa de participación que incluya a Rusia, Cuba y China.
El ministro de Relaciones Exteriores e Perú, Néstor Popolizio dijo que “vamos a decidir cómo vamos a continuar con el programa de participación en los próximos días en Guatemala (…), es muy importante que estos países tan importantes (Rusia, Cuba, China) sean parte de la solución y no sean parte del problema”, aseveró el funcionario peruano.
El bloque europeo y el latinoamericano se reunieron en la sede de Naciones Unidas para debatir salidas a la crisis política que vive Venezuela.
Después de la reunión, Popolizio, junto al canciller chileno Roberto Ampuero y la canciller canadiense Chrystia Freeland leyó en rueda de prensa una declaración conjunta de ambos grupos en la que se dijo que quieren contribuir a una solución política, pacífica y democrática a la situación en Venezuela.
Por su parte, la alta representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Federica Mogherini, asistió al encuentro junto a los cancilleres de Portugal y Uruguay. Mogherini no habló con la prensa a su salida de la reunión.
Asimismo, el canciller peruano agregó que también se espera que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) participe en la discusión para abordar la recuperación socioeconómica de Venezuela.
“Vamos a tener una reunión con el BID para pensar cómo podemos ayudar a recuperar la situación económica y social en el país”, aseveró Popolizio.
Es imperativo recordar que la mayoría de los estados miembros del grupo respaldan al líder opositor Juan Guaidó.
La tensión política en Venezuela se agravó a fines de enero, cuando Guaidó se autoproclamó presidente encargado, una declaración que el presidente Nicolás Maduro tachó de golpe de Estado orquestado por Washington.