LIMA.- “Invocando a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, nuestros más altos valores republicanos, herederos de la gloria de la gesta libertadora, nosotros, efectivos y componentes de la Fuerza Armada Nacional, nos dirigimos a la nación y a la comunidad internacional”.
De esta manera comienza el comunicado de un grupo de militares venezolanos exiliados en Perú que desconocieron al Gobierno de Nicolás Maduro y expresaron su total apoyo al opositor Juan Guaidó. La Asamblea Nacional aprobó una Ley de Amnistía para amparar estos casos. Ley a la que explícitamente hicieron referencia.
El portavoz del grupo, José Hidalgo Azuaje, conocido por haberse fugado de la cárcel militar de Ramo Verde, se puso a las órdenes del presidente de la Asamblea Juan Guaidó y animó al resto de los militares del país a seguir su ejemplo. Al grito de “¡muera la tiranía, viva la libertad!”, el comunicado acaba apelando a Guaidó: “ordene, mi comandante en jefe”.
“Nosotros hicimos un juramento a la nación, no al comandante de las Fuerzas Armadas, que es el presidente” explica el teniente Hidalgo entrevistado por una televisión local después del pronunciamiento, acompañado por el teniente Carlos Guillén Martínez.
Así afirmaba que su intención era también dar a conocer a la gente que no solo hay una resistencia civil al régimen de Maduro en Venezuela, sino que “también hay un movimiento de resistencia militar”.
En una entrevista transmitida por UCI Noticias, Guillén recordó que esta semana se cumplió un año de la muerte de Óscar Pérez, el piloto de helicóptero que se rebeló contra Maduro y cuya muerte fue transmitida en vivo a través de las redes sociales.
“Nosotros estamos conscientes de quién nos estamos enfrentando, no somos terroristas, como ellos quieren presentarnos, somos hombres dignos, de uniforme, que tenemos una razón de ser un juramento y estamos dispuestos a asumir las consecuencias en pro de la liberación de nuestra patria”, afirmó.