TEGUCIGALPA.— La autoridad electoral de Honduras convocó este domingo a elecciones primarias el 9 de marzo con miras a los comicios generales de noviembre del 2025, en medio de la crisis por el fin del tratado de extradiciones suscrito con Estados Unidos.
«Desde el Consejo Nacional Electoral (…) convoco a los partidos políticos legalmente inscritos a elecciones primarias que se llevarán a cabo el domingo 9 de marzo» del 2025, llamó la presidenta de la autoridad electoral, Ana Hall.
Las elecciones son convocadas en medio de una crisis que se desató el 28 de agosto cuando la presidenta izquierdista Xiomara Castro eliminó el tratado de extradición de 1912, pero que desde 2014 permitió la entrega a Estados Unidos de medio centenar de señalados por narcotráfico, incluyendo el expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022) que fue condenado a 45 años de cárcel.
«Honduras pasa por tiempos difíciles, todo indica que el contexto de las elecciones será complejo en un país polarizado donde los adversarios políticos se hacen señalamientos, con o sin razón, que influyen en generar un indeseable ambiente y dudas y tensión», resume Hall.
Castro, que asumió el 27 de enero del 2022, tiene que entregar en la misma fecha del 2026.
Tres partidos están inscritos en el proceso para elegir los candidatos que participarán en las elecciones generales del último domingo de noviembre de 2025.
El oficialista partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda) lleva como principal aspirante a la presidencia a la recién nombrada ministra de Defensa, Rixi Moncada, una abogada que también se desempeñó como ministra de Finanzas.
Por su parte, el derechista Partido Nacional (PN, derecha) presenta como principales aspirantes al exalcalde de Tegucigalpa, Nasry Asfura, y a Ana García, esposa del encarcelado expresidente Juan Orlando Hernández.
En tanto, por el Partido Liberal (PL, derecha) se postulan el excandidato presidencial y presentador de televisión, Salvador Nasralla, y el diputado Jorge Cálix.
Ambos se adhirieron recientemente al PL, Nasralla al desligarse del gobierno como designado presidencial (vicepresidente) por desacuerdos en la toma de decisiones y Cálix también se separó de Libre por sentirse marginado, según explicó.
Cerca de seis millones de hondureños están convocados a las elecciones primarias.