Informes confusos en las charlas sobre Kabul en Moscú

0
145

MOSCÚ.- Un alto funcionario talibán dijo el miércoles que Estados Unidos había prometido retirar la mitad de sus tropas de Afganistán para fines de abril, aunque el ejército estadounidense negó haber establecido un plazo.

Abdul Salam Hanafi, hablando al margen de una reunión en Moscú entre los talibanes y otras prominentes figuras afganas, dijo que los funcionarios estadounidenses prometieron que la retirada comenzaría este mes. «Los estadounidenses nos dijeron que desde principios de febrero hasta fines de abril, la mitad de las tropas de Afganistán serán retiradas», informó Hanafi a los periodistas.

Pero el portavoz del Pentágono, coronel del ejército Rob Manning, sostuvo que el ejército estadounidense no recibió ninguna orden para comenzar a retirarse. «Las conversaciones de paz con los talibanes continúan, pero el Departamento de Defensa no ha recibido una directiva para cambiar la estructura de la fuerza en Afganistán», rectificó Manning.

Una portavoz del ejército estadounidense en Kabul también negó un retiro inmediato de tropas. «Si todas las partes hacen lo necesario para evitar que Afganistán sea utilizado como plataforma para el terrorismo, si las condiciones lo permiten, estamos dispuestos a ver los cambios en la presencia de la fuerza», declaró a la agencia de noticias AFP.

Sher Mohammad Abbas Stanikzai, jefe de la delegación de los talibanes en Moscú, también contradijo los comentarios anteriores de Hanafi sobre un retiro estadounidense, diciendo que aún no se había fijado una fecha.

Hanafi dijo que Washington y los talibanes acordaron que todas las tropas extranjeras eventualmente se irían y que Afganistán nunca se usaría como base para los ataques a Estados Unidos. Añadió que Estados Unidos y los talibanes crearán un comité técnico que «trabajará en un calendario para la retirada de las tropas restantes».

Los talibanes entraron en la segunda jornada de conversaciones sin precedentes con poderosos políticos afganos en Moscú el miércoles, eludiendo al gobierno de Kabul. Ningún funcionario del gobierno estuvo presente en las reuniones.

Stanikzai hizo una extraña aparición frente a los medios internacionales junto con el expresidente Hamid Karzai después de las conversaciones. «Fue muy exitoso. Estuvimos de acuerdo en muchos puntos y tengo la esperanza de que en el futuro podamos tener más éxito, y finalmente podamos alcanzar una solución, podemos encontrar una paz completa en Afganistán», comunicó Stanikzai. Karzai también llamó a las discusiones «muy satisfactorias».

La cumbre de Moscú tuvo lugar una semana después de que los talibanes mantuvieran conversaciones con el objetivo de poner fin a 17 años de lucha con los negociadores estadounidenses en Catar. El presidente afgano Ashraf Ghani tampoco fue invitado a la mesa en Doha.

Un alto general de Estados Unidos dijo que Kabul debe participar en las conversaciones para que el impulso a un acuerdo de paz tenga éxito. «En última instancia, necesitamos llegar a una discusión entre los talibanes y Afganistán», aseguró el general Joseph Votel, jefe del Comando Central de Estados Unidos, a los legisladores de su país. «Solo ellos podrán resolver los problemas clave involucrados en la disputa», agregó.

Ghani dijo que había hablado el martes por la noche con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien destacó la importancia de «garantizar la centralidad del gobierno afgano en el proceso de paz». El presidente afgano ha expresado su frustración por haber sido marginado, a la vez que sus enemigos políticos compartieron oraciones y comidas con los talibanes mientras discutían el futuro del país. «La reunión de Moscú no es más que una fantasía. Nadie puede decidir sin el consentimiento del pueblo afgano», reclamó Ghani ante la emisora ​​afgana TOLOnews. «Los que se han reunido en Moscú no tienen autoridad ejecutiva. Pueden decir lo que quieran, pero ¿a quién representan?», sostuvo.