BUENOS AIRES.- Mientras Argentina intenta encaminarse hacia una recuperación económica que desde la asunción al poder de Mauricio Macri se ha tornado dificultosa, a la vez que la mega causa de corrupción que se desató en los tribunales federales tras la aparición de los denominados “’Cuadernos K”, que han llevado a prisión a una serie de reconocidos empresarios ligados a la obra pública durante la administración del matrimonio Kirchner, ahora desprende una nueva investigación, liderada por una consultora extranjera luego del manejo dudoso de un contrato de construcción que apunta hacia la empresa Aeropuertos Argentina 2000, operadora de casi todos los aeropuertos de la República Argentina.
Lo llamativo de este caso es que en esta oportunidad, no solo se observan maniobras dudosas durante los mandatos de Néstor y Cristina Kirchner, el empresario Eduardo Eurnekian, quizás el hombre más respetado por la comunidad armenia argentina, estaría siendo también investigado en la causa de los cuadernos que lleva adelante el juez federal Claudio Bonadio.
Acorde a una publicación en el portal argentino Infobae, su apellido ya había sido mencionado anteriormente. Su sobrino, Hugo Eurnekian, se presentó ante el juzgado a días de estallado el escándalo para aclarar su situación. Como otros empresarios, declaró haber hecho aportes para la campaña electoral de Frente Para la Victoria en 2013, y que el receptor había sido Roberto Baratta, mano de derecha de Julio De Vido. Ahora, el propio fundador del imperio deberá dar su versión de los hechos.
Pero ahora, una consultora de inteligencia corporativa con base en Panamá, tendría los ojos puestos sobre un empleado del holding cuyo nombre es Fernando Dendi.
Dendi, conocido en los pasillos aeroportuarios como “el recaudador» y que se autoproclama “hombre de confianza” de Nicolás Caputo, versión que no pudo ser confirmada, es gerente de infraestructura de AA2000 y depende de manera directa de Daniel Ketchibachian quien cumple funciones como director del aeropuerto internacional de EZEIZA, el de mayor envergadura a nivel nacional. Este último sucedió en el cargo a Martín Leal quien se supone fue el verdadero impulsor de Fernando Dendi, vinculado a la familia Eurnekian desde 2000.
Dendi habría trabajado para la constructora Caputo S.A. y también para el exsocio del matrimonio Kirchner, Cristóbal López, quien se encuentra en prisión y procesado por múltiples desfalcos al Estado. Dendi habría formado parte integral dentro de la estructura de la empresa CRIBA, llamativamente ganadora de la obra más grande concesionada en Aeropuerto de la Ciudad de Buenos Aires y que implica el desarrollo de seis hectáreas de superficie total ganadas al agua que se convertirán en un espacio verde cuando termine la primera etapa del proyecto, previsto para abril de 2019.
Acorde a las fuentes consultadas por el GMB, Dendi se presenta a si mismo como el recaudador de Martín Eurnekian, quien hábilmente se posicionó como sucesor de su tío dentro de la estructura del holding.
Dentro del paquete de acciones judiciales a ser presentadas en los próximos días ante organismos argentinos y extranjeros llegarían algunos reportes a la oficina anticorrupción de Argentina que dirige la exdiputada macrista, Laura Alonso, dado que el Estado argentino es accionista de AA2000, situación que podría generar la intervención de la empresa por parte del gobierno.
En este aspecto puntual se estaría denunciando a Fernando Dendi como el responsable de la manipulación del contrato de la obra de tierras ganadas al río sobre la costanera frente al Aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires. Ocurre que el día anterior de la fecha de cierre de la licitación, Dendi se las ingenió para habilitar “otro método constructivo” para hacer la contención del Río, originalmente en el pliego se solicitaba el sistema de tablestaca, autorizando “repentinamente” y en el último día la opción de otros sistemas más económicos, con lo cual solo quienes sabían de la posibilidad del cambio con anterioridad pudieron preparar nuevas propuestas alternativas, impidiendo que los oferentes originales pudieran cambiar de sistemas.
Esta maniobra orquestada a favor de la empresa CRIBA, en la que Dendi supo trabajar, permitió la captura de un contrato de más de mil millones de pesos.
Como si esto fuera poco, se dice en las denuncias que esta periodista ha podido cotejar, que en el predio de EZEIZA hace años que se almacenan transformadores que contienen PCB un refrigerante producido por la firma MONSANTO y que es altamente nocivo para la salud en caso de quemarse y volatizarse, el mismo se almacena ilegalmente en el predio de la empresa de incineración de residuos aeroportuarios DRACONIS.
Las instrucciones de la Oficina Anticorrupción fueron claras y para evitar actuar por denuncias que pueden ser infundadas se habría solicitado al ORSNA, el organismo que regula la actividad aeroportuaria argentina y a la Auditoria General de la Nación, que eleven un informe respecto de la concesionaria AA2000 y particularmente sobre las obras autorizadas por Dendi, sobre quien se estaría determinando su vinculación con las empresas beneficiadas con contratos millonarios como así también con aquellos que atentan contra la salud pública dada la peligrosidad manifiesta de mantener dentro de las instalaciones residuos tóxicos.
No sólo Martín Eurnekian se vería involucrado en responder por estas denuncias, también podría ser convocado a dar explicaciones el actual presidente del ORSNA Patricio Di Stefano, hombre de la Fundación Sofía y señalado como discípulo político de Horacio Rodríguez Larreta, actual jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y con aspiraciones a la presidencia de la nación. Di Stefano, cuyo nombre habría aparecido al tiempo de investigar las actividades de Dendi, tendrá que explicar la falta de controles sobre AA2000 y sobre todo las contrataciones de seguros medioambientales contratados con aseguradoras vinculadas al poder.
El oficialismo enfrenta estos meses un recorrido hacia el intento de reelección de Mauricio Macri como presidente de Argentina, al tiempo que la oposición no consigue despegarse de la imagen negativa que carga la gestión Kirchner, que habría dejado el país al borde de la bancarrota y el defaúlt financiero, en su alocada alianza con Irán y Venezuela.
Sin embargo, Cristina Fernández de Kirchner siempre negó su participación en una presunta red de corrupción y acusó al juez Claudio Bonadio de ser un brazo del poder Ejecutivo para limitar su candidatura presidencial y se adentra en un escenario político cada vez más complejo en un año donde se realizarán elecciones generales.
Las encuestas exponen al oficialismo y al kirchnerismo como los favoritos, sin embargo, la decisión final de Kirchner dependerá, en buena medida, de su desenlace en los tribunales argentinos. Hoy la expresidenta está procesada en cinco expedientes, cuatro de los cuales ya fueron elevados a juicio a oral.
La corrupción estructural de la era Kirchner dejó las puertas abiertas para la llegada al poder de una nueva opción de gobierno. Más allá de los avatares de la política económica que aún no encuentra el rumbo adecuado, un nuevo escándalo de corrupción estaría a punto de desatarse, esta vez, desde las entrañas del sector privado y con posibles efectos colaterales sobre el oficialismo.
