TEHERÁN.- La nación persa aprobó el uso de emergencia de la primera vacuna desarrollada en el país contra el COVID-19, reportó este martes la prensa estatal.
La autorización de emergencia fue aprobada después de que el país, una de las naciones de Oriente Medio más afectadas por la pandemia, tuvo problemas para importar suficientes vacunas.
Speed Namaki, ministro de Salud, aseguró el fin de semana que “el permiso para usar la vacuna iraní COVIrán ya fue otorgado”.
La farmacéutica iraní Shifafarmed desarrolló la vacuna basada en un virus inactivo y el primer estudio de su inocuidad y efectividad comenzó a finales de diciembre.
Teherán también informó que trabaja en una vacuna en la que coopera con Cuba. Namaki indicó que ese otro antídoto se sumará al paquete de vacunación del país la próxima semana.
La investigación de vacunas tomó urgencia en la nación persa debido a que funcionarios afirman que las fuertes sanciones de Estados Unidos sobre el país obstaculizarán los intentos de inoculación masiva.
Aunque Irán tiene acceso a las vacunas, incluso a través de su participación en COVAX, los bancos e instituciones financieras internacionales se muestran reticentes con Teherán por temor a las sanciones impuestas por Washington.
Bajo las normas de COVAX, Irán podrá tener vacunas para apenas la mitad de sus 82 millones de habitantes.