TEHERÁN.- La diplomacia persa aseguró que su país no tendrá una conversación “ni directa ni indirecta” con los estadounidenses en Viena, a pesar del pedido de las demás naciones que firmaron el acuerdo nuclear de 2015 y que además se ofrecieron a mediar para intentar que Estados Unidos vuelva al acuerdo y que Irán cumpla otra vez con los límites de producción nuclear.
El intento más importante que hubo hasta ahora para que Washington regrese al pacto nuclear e Irán retome sus compromisos asumidos en 2015, parece cada vez más lejos de cumplirse.
Desde el pasado viernes, las potencias que suscriben el pacto, Reino Unido, China, Francia, Alemania, Rusia, se ofrecieron como mediadoras entre Teherán y Washington, para que las naciones tuvieran conversaciones indirectas. Esto es que aunque funcionarios de todos los países estarán el próximo martes de 6 abril en Viena, Austria; el Gobierno estadounidense y el iraní no se reunirán en la misma sala, sino que negociarán a través de los demás países.
La Administración de Joe Biden reconoció en principio que ese intento era un “gran paso” y se mostró entusiasmado por participar. No obstante, la desconfianza persa lo hace ser más páutelos y catalogó de “innecesario” un encuentro entre los dos gobiernos, para finalmente este domingo terminar de cerrar la puerta.
“En Viena, no tendremos conversaciones con los estadounidenses, ni directa ni indirectamente”, aseguró Abbas Araghchi, viceministro de Relaciones Exteriores de Irán y quien viajará a Australia como parte de la delegación iraní.
Araghchi ratificó que solo conversan con los países 4+1, es decir los cuatro que están en el Consejo de Seguridad de la ONU (China, Rusia, Reino Unido, y Francia y Alemania), todos firmantes del acuerdo nuclear.
“Si los países 4+1 logran persuadir a Estados Unidos por cualquier medio que conozcan, no nos preocupa como lo van a hacer, actuaremos en consecuencia. Las conversaciones con 4+1 en Viena serán completamente técnicas”, aseveró el viceministro iraní.
Según el diplomático persa, Irán descartó la posibilidad de una conversación indirecta o directa con Estados Unidos por que Teherán se mantiene fuerte en su postura de que Washington primero tiene que levantar todas las sanciones que tiene en contra del país para luego sí pensar en empezar de nuevo el compromiso nuclear asumido en 2015.