KABUL.- Al menos ocho civiles murieron en la explosión de un coche bomba cerca de un edificio del gobierno provincial en la provincia oriental de Nangarhar, en Afganistán.
Después de la explosión, cuatro atacantes irrumpieron en la dirección de finanzas en la capital provincial, Jalalabad, provocando fuertes enfrentamientos con los oficiales de seguridad. Los cuatro asaltantes fueron asesinados por las fuerzas de seguridad después de cinco horas de combate armado.
Attahullah Khogyani, vocero del gobernador de la provincia de Nangarhar, dijo que ocho civiles, incluidos tres empleados del departamento de finanzas, murieron en el ataque con coche bomba. Cuarenta y dos personas resultaron heridas.
El grupo terrorista Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque. En el último tiempo, los sitios de registro de votantes también han sufrido atentados, a medida que el país se prepara para celebrar sus elecciones legislativas, largamente postergadas, programadas para octubre.