BOGOTÁ.- El presidente colombiano Iván Duque sostuvo el viernes un encuentro cordial con desmovilizados de las Farc en el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación ubicado en el departamento del Cesar.
El mandatario indicó que “todas las personas, absolutamente todas las que están en el proceso de reincorporación pueden tener la absoluta tranquilidad de que nosotros queremos hacer el mayor esfuerzo por el éxito de ustedes”
Asimismo, el presidente les explicó punto por punto las objeciones a la ley de la JEP y aseguró que respetará la decisión del Congreso, cualquiera que ella sea. “Y que el Congreso decida como les dice su conciencia, porque yo no compro conciencias”, sentenció.
Duque y su partido, el cual lidera el expresidente Álvaro Uribe, son acusados de “apuñalar el corazón del Acuerdo de Paz”.
Tras conocerse que Duque propuso la modificación de seis artículos de la Jurisdicción Especial para La Paz (JEP), la exguerrilla emitió un comunicado en el que denuncia la postura guerrerista del mandatario y su mentor, Uribe Vélez.
Rodrigo Londoño, líder de las FARC, aseguró a través de Twitter: “atacando la JEP solo buscan ocultar la verdad del conflicto armado y su responsabilidad. Aquí seguimos poniéndole la cara a la verdad y a las víctimas. Aquellos que bombardean La Paz no tiene las agallas para pensar en un país diferente”, arremetió el exguerrillero.
Las objeciones de Duque a ley estatutaria de la JEP suponen un complejo revés político y legislativo que para los firmantes del Acuerdo de Paz hace parte de una estrategia para lograr “una variación unilateral del acuerdo de paz” y desconocer “las normas constitucionales que consagran los principios fundamentales que deben regir el funcionamiento de la JEP”.
Las objeciones a la ley abrieron en ese país sudamericano un debate jurídico al que no se había enfrentado durante la última década, pero además reviven preguntas sobre los riesgos que enfrenta La Paz en ese golpeado país.