WASHINGTON.- Johnson y Johnson deberá pagar USD 572 millones tras un histórico fallo. Un juez asegura que la multinacional contribuyó al “perjuicio público” al fomentar el consumo de analgésicos de receta médica altamente adictivos.
El fallo, que J&J apelará, podría afectar el futuro de otras casi 2.000 demandas presentadas contra fabricantes de opiáceos en varias jurisdicciones de ese país.
J&J es la primera compañía farmacéutica en ir a juicio por la epidemia de adicción a los opioides que afecta a Estados Unidos y que dejó más de 70.000 muertes por sobredosis en 2017.
En su veredicto, el juez del condado de Cleveland, Oklahoma, Thad Balkman, dijo que los fiscales habían demostrado que J&J contribuyó al “perjuicio público” al fomentar el consumo de analgésicos de receta médica altamente adictivos.
“Esas adicciones comprometieron la salud y la seguridad de miles de personas de Oklahoma”, señaló.
Balkman consideró que el laboratorio Janssen, división farmacéutica de J&J, adoptó prácticas de “marketing engañoso y promoción de opioides”, lo que llevó a una gran crisis de dependencia de estos analgésicos, muertes por sobredosis y un alza en los síndromes de abstinencia neonata en el estado.
“La crisis de opiáceos devastó el estado de Oklahoma y debe ser contenida de inmediato”, dijo el juez.
El dinero de la indemnización tendrá como destino un “plan de reducción” para la atención de adictos, familias y comunidades afectadas por la crisis en Oklahoma, donde según las autoridades unas 6.000 personas murieron por sobredosis de opioides desde el año 2.000.
Sin embargo, la condena de 572 millones de dólares es mucho inferior a los 17.000 millones que pedían los fiscales para un programa de 30 años para enfrentar la epidemia.
Como resultado del fallo, las acciones de J&J subieron un 2% sobre las 21H00 durante los intercambios electrónicos del mercado, que ya estaba cerrado cuando se anunció la sentencia.
Los opioides son una clase de medicamentos que se encuentra naturalmente en la amapola, la mismas que se usa para producir la adictiva heroína. Se prescriben para tratar varios grados de dolor porque actúan de una manera más rápida, prolongada y fuerte que los analgésicos tradicionales.
Esas son las mismas características que hacen que los opioides sean potencialmente adictivos y que puedan causar sobredosis de manera relativamente fácil.