WASHINGTON.— El Departamento de Justicia estadounidense ofreció a Boeing un acuerdo de culpabilidad que le permitiría evitar un juicio relacionado con dos accidentes mortales del avión 737 MAX, dijo el domingo un abogado de las familias de las víctimas.
Los detalles del acuerdo, que obliga a Boeing a pagar una multa y someterse a un supervisor externo, fueron comunicados el domingo a las familias en una presentación del Departamento de Justicia, dijo Paul Cassell, profesor de derecho de la Universidad de Utah, quien las representa.
Dijo que las familias «objetarán enérgicamente» el acuerdo si Boeing finalmente lo acepta y lo presenta ante un juez. Contactada por la AFP, Boeing declinó hacer comentarios.
El diario The New York Times informó hace una semana que los fiscales estaban considerando un acuerdo alternativo de este tipo, conocido como acuerdo de procesamiento diferido, pero el Departamento de Justicia dijo que aún no había tomado una decisión.
En mayo, el Departamento de Justicia concluyó que Boeing podría ser enjuiciada por la violación de otro acuerdo diferido alcanzado tras dos accidentes fatales del 737 MAX en 2018 y 2019, en los que murieron 346 personas.
Bajo esa instancia, Boeing acordó pagar 2.500 millones de dólares para resolver los cargos de fraude relacionados con la certificación del 737 MAX.
Pero el fabricante volvió a estar bajo escrutinio este año tras el incidente del 5 de enero de un avión 737 MAX de Alaska Airlines que realizó un aterrizaje de emergencia tras perder un panel del fuselaje en pleno vuelo.
Dicho incidente puso de nuevo los procesos de fabricación de Boeing en la mira de los reguladores y del Congreso.
Las familias de las víctimas han urgido a los fiscales federales a llevar a Boeing a juicio en lugar de llegar a otro acuerdo.
Pero los fiscales también enfrentan presiones para no perjudicar aún más a Boeing, considerada una empresa clave de la industria aeronáutica estadounidense, así como para la seguridad nacional.
En su presentación del domingo, el fiscal principal «admitió que hay ‘un gran interés’ de las familias en ir a juicio, pero insistió en que el Departamento de Justicia no podía probar los cargos más allá de una duda razonable», dijo Cassell.
«Las familias abogaron una y otra vez por un juicio y por permitir que un jurado tomara esa decisión», añadió.