CARACAS.- Nicolás Maduro rechazó la paralización de la empresa de alimentos y la liquidación de los empleados y consideró el hecho como “absolutamente inconstitucional e ilegal” y anunció durante un acto de su campaña que la planta fue entregada a los empleados para que mantengan la producción.
Maduro aseguró que la empresa cesó sus actividades a 5 días de las elecciones presidenciales porque “creen que el pueblo se va asustar”, también aseveró que iniciará acciones internacionales para que los responsables de la multinacional Kellogg´s “paguen en los tribunales” y sean capturados.
La empresa de alimentos aseguró desde Michigan, donde está su sede principal, que decidió paralizar las actividades de su filial venezolana por el “deterioro económico y social” que enfrenta el país sudamericano, sumido en una terrible crisis económica.
Así, Kellogg´s se suma a la larga lista de compañías nacionales e internacionales que en los últimos meses han suspendido o mermado sus operaciones en el país bolivariano debido a una desbocada hiperinflación que alcanzó el mes pasado una tasa analizada de 13.776% de acuerdo a los cálculos de congresistas opositores.
Sin embargo, la compañía señaló que de mejorar la situación reanudara sus operaciones en el país sudamericano.