PARÍS.— Los partidos de izquierda franceses siguen planeando formar un Gobierno conjunto después de que se alzaran como el bloque más fuerte en el Parlamento en unas elecciones anticipadas, pero es improbable que se produzca un pacto esta semana, dijo el lunes el jefe del Partido Socialista (PS).
«No ocurrirá nada antes del 18 de julio» dijo Olivier Faure a la cadena de televisión France 2, en referencia a la fecha prevista para la primera reunión de la recién elegida Asamblea Nacional.
El Nuevo Frente Popular (NFP), una alianza de socialistas, verdes, comunistas y euroescépticos, ganó las elecciones parlamentarias a principios de mes, pero se quedó muy lejos de la mayoría.
«Nos tomaremos nuestro tiempo, no se preocupen», dijo Faure.
Sus declaraciones, tras una semana de conversaciones infructuosas en el seno del bloque, marcan un cambio de tono.
Tras su sorprendente victoria en las elecciones del 7 de julio, Faure y otros líderes dijeron que estaban preparados para formar Gobierno y que presentarían un nombre para el puesto de primer ministro en cuestión de días. Sin embargo, no se ha producido ningún avance desde entonces.
El presidente Emmanuel Macron instó la semana pasada a los principales partidos de la Asamblea Nacional francesa a formar una coalición capaz de reunir una mayoría «sólida», presionando a los sectores más moderados del NFP para que abandonen La Francia Insumisa (LFI) y se unan a los centristas de Macron.
Incluso si la izquierda logra ponerse de acuerdo sobre un nombre para proponer como jefe de Gobierno, aún no estaba claro si Macron aceptaría nombrar a un primer ministro de sus filas, ya que a cualquier Gobierno de este tipo le faltarían aproximadamente 100 escaños en la Asamblea para formar una mayoría estable.