BOGOTÁ.- En un nuevo video que se publicó este domingo de los disidentes del antiguo grupo de las FARC que retomaron las armas, invitan a militares colombianos a unirse a su causa de guerra contra la “oligarquía” colombiana.
En esta ocasión el que habla es Seuxis Hernández alias “Jesús Santrich”, pedido en extradición por Estados Unidos por narcotráfico, que vestido con su traje militar y armado hablaba junto a siete hombre y mujeres que lo acompañaban.
Santrich espetó un discurso calcado al que hace 4 días pronunció Iván Márquez, en un vídeo similar, en el que avisaba que él y un centenar de hombres más retomaban la lucha armada por la supuesta traición del Estado al tratado de paz.
Salvo por la misma línea discursiva, Santrich en esta ocasión le pidió a los militares unirse a la causa de esta nueva guerrilla, que sostiene que será reaccionaria, buscará asociarse con otros rebeldes y cambiará su estrategia para atacar a la “oligarquía”.
“Nuestro llamado también es a los integrantes de la fuerza pública que tengan dolor de pueblo a que caminemos juntos por sus reivindicaciones y por su felicidad”, dijo el excongresista Santrich.
Santrich fue detenido hace más de un año acusado de planear el envío de varias toneladas de cocaína a Estados Unidos a pedido de un cartel de México, según acusa Washington y la Fiscalía colombiana.
Su encarcelamiento puso a temblar el acuerdo de paz. Hace unos meses recobró la libertad, asumió como representante a la Cámara de Diputados por su partido, negó las acusaciones en su contra, y posteriormente escapó para aparecer vestido y armado para la guerra, a pesar de ser invidente.
“Nuestro objetivo no es ni el soldado, ni el policía, ni el oficial, ni suboficial respetuoso de los hechos y de los intereses populares, sino la oligarquía excluyente, corrupta; esa oligarquía mafiosa y violenta que cree que puede seguir atrancando las puertas del futuro”, reza en su mensaje el guerrillero.
El gobierno, por su parte, acusa a Santrich y Márquez de huir del acuerdo de paz porque no quieren romper sus relaciones con el narcotráfico y ahora posan de rebeldes.