MUNDO.— Arabia Saudita instó este domingo a sus ciudadanos a abandonar Líbano sin demora ante el temor de una escalada militar en Oriente Medio entre Irán y sus aliados e Israel.
La embajada saudita en Beirut indicó en un comunicado publicado en X que sigue «de cerca los acontecimientos en el sur de Líbano», cerca de la frontera con Israel, y pidió a sus nacionales que «abandonen Líbano inmediatamente en aplicación de la prohibición de viajar a este país».
Francia también instó a sus ciudadanos a abandonar el Líbano de inmediato, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos y Reino Unido, debido al creciente temor de una intensificación militar entre Irán y sus aliados e Israel, tras el asesinato del líder de Hamás y del comandante de Hezbolá.
En las últimas horas, un ataque con cuchillo en un suburbio de Tel Aviv dejó dos muertos, y Hezbolá lanzó varios cohetes contra el norte de Israel, aunque la mayoría fueron interceptados por el sistema antiaéreo israelí.
Irán, Hamás y Hezbolá han acusado a Israel de la muerte del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en su residencia en Teherán, ocurrida el miércoles. Israel no ha comentado sobre este asesinato, que se produjo poco después de que un bombardeo israelí matara al jefe militar de Hezbolá, Fuad Shukr, cerca de Beirut.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, advirtió a Israel sobre un «castigo severo», mientras que el líder de Hezbolá, Hasan Nasrallah, prometió una «respuesta inevitable». El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que su país está preparado para cualquier escenario, tanto defensivo como ofensivo. Estados Unidos, principal aliado de Israel, ha reforzado su presencia militar en Oriente Medio para apoyar la defensa de Israel.
La guerra en Gaza, iniciada el 7 de octubre por un ataque de Hamás, ha generado conflictos entre Israel y grupos armados vinculados a Irán en Siria, Líbano, Irak y Yemen.
En respuesta al aumento de la tensión, Suecia, Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Jordania han solicitado a sus ciudadanos que abandonen el Líbano de inmediato. Francia, en particular, ha instado a los franceses a salir «lo antes posible» y a considerar abandonar temporalmente Irán.
Canadá, que ya había solicitado a sus ciudadanos que se fueran del Líbano a finales de junio, también ha advertido contra los viajes a Israel. Varias aerolíneas han suspendido temporalmente sus vuelos a Beirut, y Lufthansa también ha detenido sus vuelos a Tel Aviv hasta el 8 de agosto.
Desde el inicio del conflicto, Hezbolá ha estado intercambiando disparos casi a diario con el ejército israelí a lo largo de la frontera. La reciente muerte de Shukr ha intensificado la tensión, y Hezbolá afirmó haber lanzado cohetes hacia Beit Hillel, en el norte de Israel. Israel ha respondido con bombardeos en el sur de Líbano. La representación de Irán ante la ONU espera que Hezbolá lleve a cabo ataques más profundos en territorio israelí.
Casi diez meses después del comienzo de la guerra en Gaza, el ejército israelí continúa su ofensiva contra el territorio palestino, que enfrenta devastación y hambruna, según la ONU.
La Media Luna Roja y la Defensa Civil palestina informaron de la muerte de 16 personas en bombardeos israelíes en Jabaliya, Deir al Balah y otros lugares. Israel estima que 111 personas siguen cautivas en Gaza, aunque 39 de ellas podrían estar muertas. En respuesta, la ofensiva israelí ha causado la muerte de 39,550 personas en Gaza, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud palestino.