SEÚL.- Los surcoreanos están retomando su vida, este miércoles, luego de un distanciamiento social sin precedentes, dándole la bienvenida con esperanza a la transición; pero bajo medidas de seguridad y con cautela ante posibles brotes del COVID-19.
A partir de este miércoles, el país asiático cambió oficialmente a la “prevención epidemiológica de la vida cotidiana” luego de dos meses de “distanciamiento social intensivo”, en sintonía con el aplanamiento constate de la curva de coronavirus.
El número de infecciones reportadas diariamente, cuyo récord fue de 909 el 29 de febrero, comenzó a bajar drásticamente a un solo dígito durante los últimos días. No se reportaron infecciones locales durante tres días consecutivos.
Esto significa que mientras se cumplan las nuevas medidas anunciadas por el gobierno sobre higiene, las personas podrán participar de actividades al aire libre y eventos de congregación masiva, como la reapertura de los gimnasios, las discotecas y eventos religiosos.
Este miércoles, la mayoría de las personas usaron mascarillas faciales en metros y autobuses, excluyendo algunos que optaron por no usarla justificando las altas temperaturas que presentó el país.
El Gobierno Metropolitano de Seúl aseguró que las galerías y los museos importantes comenzarán a abrir de forma gradual desde este miércoles. Las personas podrán solicitar una especie turno online y las horas de visita estarán limitadas a un máximo de dos horas.
La mayoría de las personas se despidieron la la transacción de las medidas estrictas de prevención epidemiológica, que las mantuvieron en casa durante más de tres meses.
Corea del Sur reporto hasta ahora 10.806 casos desde que reportó su primer contagio el 20 de enero.