SANTIAGO.- La Mesa de Unidad Social que agrupa a más de 100 organizaciones sociales, convocó un “Súper lunes” en Chile, con marchas, concentraciones y cacerolazos en todos el país con el objetivo de visibilizar que” el gobierno sólo profundiza la agenda neoliberal en lugar de atender la emergencia social”.
Los chilenos continuan con sus reclamos que iniciaron el 18 de octubre con una inédita explosión social a raíz del alza en el precio del pasaje del Metro en horario pico y que había iniciado el 7 del mismo mes con un llamado a evadir el pago del boleto.
La cita de este lunes será a las 12 horas en la plaza de los tribunales de justicia, frente al exCongreso nacional. Desde allí se exigirá a los legisladores que frenen la tramitación de proyectos de ley que “solo apuntan a profundizar las desigualdades” y que se encuentra “en las antípodas de las demandas de que el pueblo chileno está exigiendo en las calles”.
Los líderes de las protestas destacaron que los más de 300 cabildos que se desarrollan y en los que han participado más de 10 mil personas en 73 comunas del país. Explicaron que son cabildos abiertos y autoconvocados, “muy distintos de los “diálogos ciudadanos” que realiza el gobierno de Sebastián Piñera eligiendo a dedo los participantes”.
“Estos cabildos nacen de la idea que este estallido social que vive el papis, solo se puede solucionar con mayor democratización, generando espacios abiertos a quienes constantemente han sido marginados”, subrayaron.
El pasado viernes el presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció que los grandes empresarios ya no serán favorecidos con un proyecto de ley para rebajar los impuestos a los más ricos del país. La medida fue anunciada en medio de una gigantesca marcha en Santiago.
Es una controversial reforma tributaria que establecía que las empresas que pagaran sus impuestos liberaban de hacerlo a sus dueños y socios. Sin embargo, esta decisión significaba una pérdida en las recaudaciones valorada en 800 millones de dólares.