NUEVA DELHI.- Un vecino de la localidad de Mudaria vivió tal vez un momento que nunca olvidará en su vida al ver a un perro callejero con la cabeza decapitada de un bebé en su boca.
La Policía inició una investigación para localizar el cuerpo del menor.
El testigo se apresuró a reportar lo visto ante las autoridades. La Policía inspeccionó el lugar donde se encontró la pequeña cabeza y llegó a la conclusión de que el pequeño había muerto días atrás, mientras que su cuerpo podría haber sido enterrado o arrojado a la basura.
La cabeza, cubierta de barro y aguas residuales, fue trasladada a un hospital local, donde fue sometida a una autopsia.
“ La investigación revisó que los registros de nacimiento de 10 días antes del hallazgo y concluyó que el pequeño “no haya nacido en un hospital y quizás los padres se hayan deshecho en secreto del bebé después de su nacimiento”.
Hasta el momento, la Policía está revisando las cámaras de seguridad de los alrededores. En el caso que logre encontrar a los supuestos padres del niño, es posible que sean sometidos a pruebas de ADN y llevados ante la Justicia.