ASUNCIÓN.- Este domingo declaró durante siete horas el presidente paraguayo Mario Abdo Benítez. Tres fiscales investigan un acta que aparentemente firmó en secreto con Brasil para la utilización de la electricidad de la represa Itaipú, lo que sería perjudicial para Paraguay.
La declaración testimonial fue “muy productiva, muy detallada”, y que puede permitirle a la investigación “avanzar significativamente”. Aunque todavía es prematuro saber si hubo “punibilidad” en la conducta presidencial, afirmó el fiscal Marcelo Pecci en conferencia de prensa posterior a la indagatoria.
Como lo he dicho siempre, nuestro compromiso es con la transparencia! Estamos a disposición de la Fiscalía para colaborar con la investigación y la búsqueda de la verdad.
— Marito Abdo (@MaritoAbdo) August 9, 2019
El documento se rubricó por representantes de ambos países el 24 de mayo pasado en Brasilia. Pero el 1 de agosto Paraguay lo anuló de manera unilateral tras desatarse una gran polémica que derivó en protestas ciudadanas.
El tema se volvió controversial porque podría perjudicar a Paraguay con la venta de energía excedente de la reserva a Brasil. Itaipú es compartida por ambas naciones.
Por otra parte, la Fiscal que participó del interrogatorio, Liliana Alcaraz sostuvo que sería una “entrevista” con el propósito de “obtener información”. Porque “en esta etapa el Ministerio Público no tiene ningún tipo de formalidad, como sí lo tiene un juicio oral, en el que sí se recogen pruebas”.
El acuerdo causó irritación en la nación paraguaya porque el documento implicaría que este país perdería todos sus excedentes energéticos. En caso de que llegara a necesitar algo de esa energía, por ejemplo, por una baja en la producción, tendría que comprarla a Brasil pero a un precio mayor al que la vendió.
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Dimisiones y culpas
Cuando el contenido del acta se dio a conocer renunció de Pedro Ferreira, presidente de la estatal nacional eléctrica de Paraguay. Asegurando no estar de acuerdo con el texto. Ferreira explicó que la firma se hizo en forma secreta, que los técnicos no fueron invitados y que el acuerdo obliga a Paraguay a contratar de 2019 a 2022 la compra de la energía excedente de Itaipú.
Itaipú, pese a ser bilateral, vende su producción a la Ande de Paraguay y Petrobras de Brasil y prohíbe la comercialización a terceros países.