CIUDAD DE MÉXICO.— Las autoridades federales confirmaron la llegada de 1.500 militares adicionales al estado de Sinaloa para combatir el crimen organizado.
«El 7 de enero del presente año, arribaron 1,500 efectivos más del Ejército Mexicano a Culiacán, Sin., con el fin de sumarse a las actividades de seguridad para revertir el incremento en los índices delictivos generados por la delincuencia organizada«, consta en una nota de prensa emitida por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) el lunes por la noche.
La misión principal de estos refuerzos, según el comunicado, es «fortalecer el Estado de derecho y colaborar con las autoridades en la detención de integrantes de la delincuencia organizada, actuando en todo momento con pleno respeto a los derechos humanos».
Además, ayudarán a las autoridades locales en tareas de asistencia social, alimentaria y de salud.
El pasado jueves, 10 militares y 19 delincuentes fallecieron en el municipio de Culiacán durante los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad e integrantes del cartel de Sinaloa tras la detención de uno de sus líderes, Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín «Chapo» Guzmán. Otras 21 personas resultaron heridas en esta ola de violencia.