BRASILIA.- Las costas de ocho estados de Brasil se encuentran contaminadas por el crudo. El presidente Jair Bolsonaro considera las posibilidades de que la sustancia provenga de un naufragio, una fuga accidental o de la actividad criminal extranjera.
Los primeros reportes sobre el vertido surgieron a finales de septiembre. El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, dijo que hay 42 ciudades afectadas y que hasta el momento se han recogido 100 toneladas de petróleo de las playas. Desde Río de Janeiro nos amplía el periodista Marcos Moreno.
La policía brasileña investiga la causa del derrame que mató ya a 7 tortugas marinas y obliga a los nadadores y pescadores alejarse de las zonas contaminadas.
Las autoridades afirmaron que detectaron el derrame, cuya fuente se desconoce todavía, en 105 diferentes puntos.
La petrolera estatal, Petrobras, declaró la semana pasada que como consecuencia de las pruebas realizadas entendieron que el petróleo derramado no es el que ellos mismos producen.
Está previsto que las autoridades le presenten a Bolsonaro una preevaluación sobre el derrame.
Por su parte, el mandatario brasileño en una nueva embestida contra la prensa, afirmó este lunes que la prensa no lo va a “derribar” luego de la publicación de un reportaje que lo vincula con el presunto financiamiento de la campaña electoral.
Dirigiéndose a la prensa desde el Palacio de Alvorada residencia oficial en Brasilia, el jefe de Estado le preguntó “ustedes quieren derribarme?, yo tengo cuero duro, va ser difícil”.
Bolsonaro está disgustado con los medios en general desde la cobertura dada a su discurso el 24 de septiembre ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York.