BOGOTÁ.- Autoridades de Colombia confirmaron este jueves la muerte del exsecretario de transparencia de la Presidencia, Rafael Merchán, quien era testigo clave en las investigaciones por hechos de corrupción relacionadas a la constructora brasileña Odebrecht en territorio colombiano.
Merchán, de 43 años, es el segundo testigo del caso en aparecer muerto en menos de dos meses, luego de que también fuera hallado sin vida Jorge Enrique Pizano.
Pizano falleció de un infarto a principios de noviembre, según el informe del hospital donde fue asistido. Tres días después de su muerte falleció su hijo Alejandro Pizano, envenenado con cianuro al beber una botella que halló en el escritorio de su padre.
El director del Instituto de Medicina Legal de Colombia, Carlos Valdés, renunció a su cargo el 20 de diciembre en medio de la controversia por el manejo de las pruebas sobre el fallecimiento de Jorge Pizano.
En el caso de Merchán, aún se desconocen las causas de su fallecimiento, según medios locales el exfuncionario se exoneraba desaparecido desde el pasado martes.
Merchán fue considerado testigo en las indagaciones al exdirector de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, por presuntamente recibir sobornos a cambio de realizar concesiones a Odebrecht y Corficolombiana parada construcción de la Ruta del Sol II, importante corredor vial en ese país sudamericano.
Asimismo, la Fiscalía estaba a la espera de las declaraciones de Merchán, solicitadas por la defensa del exdirector del ANI. Los abogados de Merchán denunciaron días atrás que había recibido amenazas.
Merchán fue acusado por presunto interés indebido en la realización de contratos, así como ocultamiento, alteración o destrucción de elementos materiales probatorios y falso testimonio.
Como si se tratase de una novela de Mario Puzo o una serie de televisión, los testigos que pueden comprometer a las altas esferas del poder están desapareciendo en ese país sudamericano ante los ojos del mundo entero sin escrupulos.