PYONGYANG.- Corea del Norte dijo este jueves que el Sur debe dejar de intentar mediar entre Pyongyang y Washington, que incrementó su presión sobre Estados Unidos para que desarrollo nuevas propuestas para salvar la diplomacia.
El comunicado norcoreano fue una aparente continuación de su descontento hacia Seúl y Washington por los paralizados contactos diplomáticos. Pero no hay indicios de que el Norte vaya a abandonar formalmente las conversaciones en el futuro, ya que la oficina de enlace intercoreana, ubicada en territorio norcoreano, sigue operativa y Pyongyang habla de buena relación entre Donald Trump y su líder Kim Jong -Un.
El comunicado se produce en el marco de la visita de Donald Trump a Japón con motivo del G20 y dos días antes de que llegue a Corea del Sur.
Estados Unidos y Corea del Norte no se han reunido públicamente desde el abrupto final de la segunda cumbre entre Trump y Kim en Vietnam en febrero. El líder norcoreano regresó al país con las manos varios luego de que Trump se negó a concederle el deseado alivio de las sanciones a cambio de sus limitados pasos hacia la desnuclearización.
El colapso de la cumbre fue un revés para el presidente surcoreano, Moon Jae-in, quien ha mediado entre Washington y Pyongyang para facilitar el diálogo entre las dos naciones y ayudar a alcanzar un acuerdo diplomático a la crisis nuclear en el Norte.
Moon reactivó los rumores sobre una posible reactivación de los contactos luego de que a comienzos de semana dijera que funcionarios estadounidenses y norcoreanos estaban manteniendo “conversaciones en la sombra” para tratar de fijar una tercera cumbre entre los mandatarios.