MOSCÚ.- El presidente ruso, Vladimir Putin, tiene previsto llegar a la India el jueves para una visita de dos días, durante la cual se espera que firmen un acuerdo de defensa por un valor de 5 mil millones de dólares.
El Kremlin informó que el motivo clave de la visita es la firma de un acuerdo por el sistema de defensa aérea S-400, a pesar del riesgo de que Estados Unidos aplique sanciones contra los países que compren armamento ruso. En la víspera de la llegada de Putin, Washington se refirió a los esfuerzos de la India por obtener una exención para evitar las sanciones establecidas en virtud de la Ley de lucha contra los adversarios de Estados Unidos a través de las sanciones (CAATSA). Un portavoz del Departamento de Estado dijo que las actualizaciones en los sistemas de armas «incluido el sistema de defensa aérea y de misiles S-400» serían un enfoque particular para CAATSA.
«La respuesta de Estados Unidos será evidente el 5 de noviembre, cuando tanto el comercio con Rusia como las importaciones de hidrocarburos de Irán lleguen a un punto de inflexión. Si los Estados Unidos deciden seguir adelante con su legislación nacional e invocar sanciones contra Nueva Delhi, pondría a prueba la resistencia de las relaciones bilaterales India-EE.UU.», informó el comodoro retirado Uday Bhaskar, director de la Sociedad para Estudios de Política. «Esta sería una situación anómala, en la que EE.UU. ubicaría tanto a India como a China en la misma canasta de ‘sanciones’. Pekín supervisará muy de cerca este problema del S-400 para detectar implicaciones estratégicas a largo plazo». El mes pasado, Washington impuso sanciones financieras al ejército chino por la compra de aviones de combate Sukhoi Su-35 y el S-400.
Sin embargo, Washington está en una posición difícil cuando se trata de India; quiere mejorar los lazos con Nueva Delhi para contrarrestar la creciente asertividad de China, algo que también ha sacudido a India. Estados Unidos e India anunciaron planes el mes pasado para hacer ejercicios militares conjuntos en 2019 y acordaron el intercambio de información militar sensible. Washington es ahora el segundo proveedor de armas más grande de Nueva Delhi. Pero Rusia sigue siendo el principal, y los nuevos acuerdos con el gigante asiático serían una gran victoria para Moscú y un desaire para Estados Unidos.