BOGOTÁ.- La oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos recibió información sobre la falsa desvinculación de niños antes del proceso formal en Caquetá, Cauca, y Meta, tres departamentos colombianos con graves consecuencias por el conflicto armado.
Esa es la grave revelación que hizo el organismo internacional en su informe anual de Derechos Humanos, revelado el pasado viernes con un foco centralizado en los efectos y la implementación de los acuerdos de paz con las Farc.
Según el escrito y los datos de la Consejería Presidencial, para el 31 de diciembre del año pasado la guerrilla solo había entregado 135 menores (75 niñas y 60 niños), en un proceso marcado por el difícil acceso a la información.
En el documento la ONU también acusa al ELN (Ejército de Liberación Nacional) y a pequeños grupos criminales en estas zonas montañosas de Colombia de seguir reclutando y utilizando niños. Según la Defensoría del Pueblo “el reclutamiento de menores esta disparado. Usan a los niños como guías o como animales de carga para llevar entre 40 y 50 kilos de armamento en recorridos que pueden tardar hasta 12 horas”, aseguró Carlos Alfonso Negret, defensor del pueblo.
El reclutamiento de menores es uno de los crímenes de guerra más condenados por la justicia internacional. En el proceso de paz con los paramilitares, en el gobierno del expresidente Álvaro Uribe Vélez, la justicia documentó centenares de menores que fueron enviados a sus casas sin el debido proceso de reintegración a la sociedad.
Un informe del Centro Nacional de Memoria Histórica documentó entre 1960 y 2016 16.870 casos de reclutamiento de menores, en un intento de los grupos armados por fortalecer sus filas, miles de niños de Colombia fueron obligados a cometer delitos, es un flagelo que todavía continua.