ADÍS ABEBA.- La Misión Permanente de Etiopía ante las Naciones Unidas condenó la masacre de 240 civiles, entre ellos 107 menores de edad, supuestamente perpetrada el 5 de agosto en la región de Afar por el Frente de Liberación Popular de Tigray (FLPT).
“La matanza masiva de niños en Afar y el uso de niños para el combate es inconcebible y equivale a una guerra librada contra el futuro de Etiopía. La comunidad internacional debe tomar nota del reprobable desafío del FLPT al alto al fuego y su incursión en las regiones de Afar y Amhara”.
Algunas horas antes, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) declaró estar “extremadamente alarmado por los informes sobre la muerte de más de 200 personas, incluidos más de 100 niños, en ataques contra familias desplazadas que se refugiaban en un centro de salud y una escuela en la región de Afar el jueves 5 de agosto.
Esta agencia de la ONU estima que cuatro millones de personas en Tigray y las regiones adyacentes de Afar y Amhara se en cuenta en una situación de crisis o inseguridad alimentaria que raya en una emergencia.
Más de 100.000 personas se vieron desplazadas por los recientes combates, uniéndose a otros dos millones forzados a abandonar sus hogares anteriormente.
Unicef calcula que el número de niños sufriendo desnutrición en el Tigray se decuplicará en los próximos 12 meses.