BUDAPEST.- El Parlamento húngaro aprobó este lunes, con prácticamente toda la oposición en contra, una enmienda legal que autoriza al Ejecutivo del primer ministro, Viktor Orbán, a gobernar por decreto por tiempo indefinido para luchar contra la pandemia del COVID-19.
Un total de 137 congresistas aprobaron la moción, que fue rechazada por 53. La oposición considera que la medida es “desproporcionada”.
El Ejecutivo de Orbán podrá emitir decretos y decidir cuándo ha pasado la situación de emergencia bajo la que se justificó el cambio legal.
Bajo este régimen el Gobierno podrá, por ejemplo, suspender leyes y bloquear la divulgación de informaciones “que puedan obstaculizar o imposibilitar la defensa” (frente a a pandemia) y aplicar penas de hasta cinco años de cárcel para los infractores.
“Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para detener la propagación del virus. El proyecto de ley encaja perfectamente en el marco constitucional húngaro”, aseguró la ministra de Justicia, Judit Varga.
No obstante, las políticas implementadas por Orbán en una década de poder llevan a la oposición a temer que el líder de 56 años abuse de los medios excepcionales.
Según entidades independientes, desde 2010 ha multiplicado sus ataques contra el Estado de derecho actuando contra la libertad de prensa, la sociedad civil o la justicia.
La oposición, de izquierda a derecha, ha criticado que no haya limitación al tiempo que el Gobierno puede dirigir el país sin control parlamentario y ha pedido que ese periodo sea de 90 días.
El Gobierno rechazó la propuesta conjunta de la oposición, argumentando que no se sabe hasta cuándo durará la pandemia mundial.
En Hungría hay actualmente 447 casos confirmados de coronavirus, que se ha cobrado la vida de 15 personas en el país centroeuropeo.