ASUNCIÓN.— El presidente de Paraguay, Santiago Peña, ha declarado su intención de buscar una solución a la controversia con Argentina sobre el cobro de peajes a las embarcaciones que navegan en el tramo argentino de la hidrovía Paraguay-Paraná mediante un arbitraje internacional.
Durante una conferencia de prensa, Peña anunció: «Estamos solicitando un arbitraje en el contexto de la hidrovía Paraguay-Paraná. Esta iniciativa cuenta con el respaldo de cuatro países, no es exclusiva de Paraguay, sino que también cuenta con el apoyo de Bolivia, Uruguay y Brasil».
El mandatario señaló que están a la espera de que Argentina designe a sus árbitros en este proceso para resolver la disputa de manera expedita.
Este anuncio se produce después de que el canciller paraguayo, Rubén Ramírez, informara previamente que Paraguay recurrirá al Tribunal Permanente de Revisión (TPR) del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) para abordar la controversia con Argentina.
El presidente Peña respaldó la decisión de su canciller y destacó que esta medida se basa en el Acuerdo de Transporte Fluvial de la Hidrovía, firmado en 1992 por Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay. «Dentro del marco del MERCOSUR, hemos decidido presentar una demanda por incumplimiento de las normas de libre circulación, de acuerdo con lo que establece el Tratado de Asunción», afirmó el presidente.
Tanto el anuncio de Peña como la acción de la Cancillería se producen un día después de que el canciller Ramírez convocara al embajador argentino en Paraguay, Óscar Domingo Peppo, para expresar su preocupación por la retención «irregular» de un convoy de diez barcazas en un tramo del corredor fluvial.