WASHINGTON.- El departamento de policía de la ciudad de Minneapolis será desmantelado, como informó Último Cable la semana pasada, aseguraron este domingo en la noche funcionarios de la municipalidad, luego de la muerte bajo custodia de George Floyd, que desató una ola de protestas contra el racismo en las fuerzas el orden, mismas que se extendieron por las principales ciudades del mundo.
Lisa Bender, presidenta del Concejo Municipal de Minneapolis, anunció que el Departamento de Policía de la ciudad “será desmantelado y reconstruido”.
Bender señaló que desde la instancia municipal se cumple el propósito de desmantelar la Policía, así como de su reconstrucción, “necesitamos un nuevo modelo de seguridad pública que realmente mantenía a salvo a la comunidad”, agregó.
“Nos comprometimos a desmantelar la policía tal como la conocemos en la ciudad de Minneapolis y a reconstruir con nuestra comunidad un nuevo modelo de seguridad pública que realmente mantenga a salvo a nuestra comunidad”, aseveró Bender.
En esa misma línea, Alondra Cano, otra integrante del concejo, publicó en su cuenta de Twitter que la decisión fue tomada por la mayoría de los miembros de la municipalidad, que coincidieron en que el departamento de policía “no es reformable y que por tanto se acabará con el actual sistema”.
En un sondeo publicado el fin de semana pero realizado entre el 28 de mayo y 2 de junio, justo cuando las protestas masivas por la muerte de Floyd estallaron, el 80% de los votantes estadounidenses consideraron que la actual situación que atraviesa el país está “fuera de control”, según la encuestas de NBC News y el Wall Street Journal.
Según el resultados del estudio, la mayoría de los republicanos (66%), demócratas (92%) e independientes (78%) está de acuerdo con que, en la actualidad, las cosas están fuera de control en Estados Unidos.
Asimismo, la propagación del COVID-19 y el coma en el que se encuentra la economía estadounidense están entre las mayores preocupaciones entre los entrevistados.
Miles de estadounidenses han expresado su rechazo a el abuso policial y el racismo en el país, con gigantescas movilizaciones en distintos estados, desafíenlo las amenazas del presidente Donald Trump de desplegar las Fuerzas Armadas en todo el territorio, lo que logró el mandatario fue cosechar críticas por la dureza con la que decidió sofocar las protestas.
Para este domingo, había cerca de 30 convocatorias repartidas a través de distintas ciudades y horarios, en las que participaron miles de manifestantes, aprovechando el clima primaveral.
Este domingo, Trump retiró a la Guardia Nacional de Washington y celebró que bajara la asistencia de manifestantes respecto a las cifras previstas. Además, el presidente repudió los planes de de reforma policial anunciados por su rival electoral, Joe Biden, y la bancada afroamericana.