WASHINGTON.- El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, dijo el miércoles que el trato que dispensa China a los musulmanes es una “enorme violación de los derechos humanos” y que Washington seguirá protestando frente al asunto.
“No se trata solo de una enorme violación de los derechos humanos, sino que no pensamos que al mundo o a China le interese implicarse en esta clase de comportamiento”, aseveró Pompeo en una entrevista con el canal PBS.
Al ser cuestionado sobre si Xi Jinping, presidente chino, es el responsable, Pompeo afirmó: “Xi Jinping gobierna el país como el líder de un pelotón de tanques, un pequeño negocio o un país, es responsable de las cosas que pasan en su nombre”.
Washington castigó a Pekín incluyendo a firmas tecnológicas como Huawei en su lista negra comercial y anunciado restricciones a las visas de funcionarios gubernamentales y del Partido Comunista Chino a los que considera responsables de la detención o abusos sobre minorías como los uigures en la provincia occidental de Xinjiang.
Pompeo pidió el pasado domingo a la comunidad internacional que se resistan a las exigencias chinas para repatriar a integrantes de la etnia uigur, afirmando que la campaña de Pekín en la región occidental de Xinjiang es un “intento de borrar a sus propios ciudadanos”.
Expertos de Naciones Unidas y activistas sostienen que al menos un millón de uigures y miembros de otros grupos minoritarios mayoritariamente musulmanes han sido detenidos en campamentos en la remota región.
China niega el mal trato a esa minoría y sostiene que Xinjiang es un asunto meramente interno.
