PRAGA.- El primer ministro de República Checa, Andrej Babis, afirmó el jueves que su país también saldrá del Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, firmado en julio por casi todos los países miembro de Naciones Unidas.
El funcionario explicó que «nadie puede decidir quién vive y trabaja con nosotros, eso es cuestión de las empresas, instituciones y el Gobierno. No cambia que no aceptaremos inmigrantes ilegales». Y adelantó que la decisión será debatida y tomada por la coalición gubernamental.
Además este país siempre se manifestó a favor de aplicar una mano dura a la inmigración, tal como Hungría y Polonia quienes también están en contra del pacto. Estos países, por ejemplo, no quisieron respaldar el plan de cuotas de la Unión Europea (UE) para reubicar a los solicitantes de asilo en el bloque.
El Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, que no será legalmente vinculante, se aprobará formalmente entre el 11 y 12 de diciembre en una reunión en Marrakech, Marruecos. El texto comprende 23 puntos con los que se intentará impulsar la cooperación para gestionar la migración y hacerla lo menos traumática para los migrantes.
Hungría, Austria, Estados Unidos y Polonia ya hicieron público su deseo de no suscribirse al mismo ya que presenta demasiadas dudas y puntos desfavorables para la soberanía de cada Nación.