Presidente de Haití elegirá al nuevo primer ministro

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PUERTO PRINCIPE.- El presidente de Haití, eligiera este lunes al nuevo jefe de Gobierno entre tres candidatos propuestos previamente por los líderes del Parlamento, en los que destaca Morjorie Alexandre Brunache, cónsul en Boston.

Los otros dos aspirantes son el primer ministro interino, Jean Michel Lapin y el alcalde Gabriel Fortuné.

Sin confirmar ninguna responsabilidad, Moise anunció el sábado a través de Twitter su encuentro con los líderes del Parlamento, y subrayó que la elección será conocida pronto. La asamblea deberá ratificar la designación del nuevo jefe de Gobierno.

El presidente de la Cámara de Diputados, Gary Bodeau anunció por la misma red social, que entre Carl Murat Cantave y el mandatario Moise, se definieron los tres nombres.

Lapin fue designado de manera interina luego de la partida del primer ministro Jean Henry Céant tras una moción de la Cámara de Diputados.

El pasado 18 de marzo, 93 diputados aprobaron una moción para revocar del cargo a Céant, y citaron la falta de cohesión entre la administración, el recrudecimiento de la crisis sociopolítica y económica, la inestabilidad nacional y las tensiones con el jefe de Estado, como problemáticas centrales de su gestión.

Entre los tres nominados, posiblemente la menos reconocida en la escena política es Marojorie Alexandre Brunache, cuya carrera se ha desarrollado entre la práctica de abogacías y la diplomacia, y se desempeña como cónsul de Haití en Boston.

Por su parte, Fortuné, actual presidente del Ayuntamiento en la ciudad de Les Cayes, es una de las figuras más cercanas al jefe de Estado, y a quien a finales de 2018, el presidente solicito encontrar una tregua política y promover el diálogo entre todos los actores.

En cambio, Lapin ha desarrollado su carrera en el Ministerio de Cultura, donde comenzó hace más de 30 años como mensajero.

El candidato elegido deberá ser ratificado por el Senado y la Cámara de Diputados y en caso de rechazo el procedimiento comienza nuevamente.

Haití esta sumergida en una profunda crisis económica y política agravada tras las masivas y violentas protestas de dos semanas que se iniciaron el pasado 7 de febrero, el mismo día en el que Moise cumplió dos años en el cargo.