ABUYA.- La inseguridad y el freno al grupo insurgente Boko Haram es un tema electoral importante para el mandatario Muhammadu Buhari, que busca la reelección en las elecciones de 2019.
Mientras Nigeria se prepara para las elecciones generales de febrero, una serie de ataques de Boko Haram ha centrado la atención en la situación de seguridad en el país. El grupo armado parece haber recuperado terreno en el noreste del territorio en 2018, ejerciendo su fuerza sobre las ciudades y aldeas que previamente había perdido frente al ejército nigeriano. Con una escalada de ataques en los últimos meses, las afirmaciones de victoria del gobierno de Nigeria contra Boko Haram parecen prematuras.
El conflicto de nueve años con Boko Haram, que ha matado a más de 20.000 personas y desplazado a otros dos millones de sus hogares en Nigeria, también se ha extendido a los vecinos Chad, Níger y Camerún. Mientras el presidente nigeriano Muhammadu Buhari se embarca en una candidatura a la reelección, ha pedido medidas urgentes para reducir el resurgimiento de los ataques del grupo.
En una reunión de emergencia de líderes de la región del lago Chad el jueves en la capital de Chad, Ndjamena, Buhari los instó a no «ceder» a los ataques. «La estrategia renovada del grupo de explotar cada vez más el área, así como su reciente despliegue de vehículos aéreos no tripulados para vigilancia, han demostrado ser factores críticos en el resurgimiento de los ataques en la región», dijo Buhari. «Nuestra determinación colectiva es erradicar al grupo de la región», agregó.