PEKÍN.- El Gobierno chino aseguró este martes que no tiene otra opción que tomar represalias contra los nuevos aranceles comerciales impuestos por Washington, lo que aumenta el riesgo de que el presidente Donald Trump pronto imponga tarifas prácticamente a todos los productos chinos que importa Estados Unidos.
Por otra parte, el primer ministro de China apeló el miércoles al apoyo al libre comercio y prometió mejorar las condiciones para las empresas extranjeras en territorio chino, tras las subidas de aranceles decretadas desde Washington, en un nuevo capítulo de una creciente batalla por la política tecnológica de China.
Las declaraciones de Li Keqiang se suman a los esfuerzos del gigante asiático para presentarse como un defensor del comercio global y del multilateralismo frente a las constantes quejas de la Casa Blanca y de otros socios comerciales contra sus políticas industriales que, según sostienen, violan sus compromisos de apertura de mercado.
Posterior a esto, horas más tarde la cartera de Comercio de China aseguró que había presentado una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra Estados Unidos por los nuevos aranceles.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió a comienzo de esta semana que si China tomaba medidas de represalia contra los agricultores o las industrias estadounidenses, “inmediatamente buscaremos la fase tres, que son aranceles sobre importaciones adicionales por aproximadamente 267.000 millones de dólares”.
En cuanto al diálogo entre ambas naciones, se desconoce si China abandonará las conversaciones sobre comercio a las que fue invitada por Estados Unidos, pero el Ministerio de Comercio dijo en un comunicado que el incremento tarifario estadounidense “planta nuevas incertidumbres en las consultas”.
Los dos gobiernos ya decretaron aranceles del 25% sobre 50.000 millones de dólares en bienes mutuos.