MADRID.- El líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y candidato a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, afronta la segunda votación de su sesión de investidura sin los apoyos necesarios para ser elegido tras el fracaso de las negociaciones para formar un Ejecutivo de coalición con la formación de corte Izquierda Unidas Podemos.
Desde que el líder socialista perdiera el martes la primera votación en el Congreso de Diputados, por falta de apoyo, las dos formaciones acometieron negociaciones contrarreloj para tratar de llegar a una posición común.
Sin embargo, la negociación avanzó con dificultad y se estancó a pocas horas de la segunda votación, que se realizó este jueves.
Como una manera de presionar a la izquierda, los socialistas divulgaron la noche del miércoles un documento de trabajo con las exigencias del partido de Sánchez, que incluyen una vicepresidencia y cinco ministerios.
“La propuesta se considera inaudible”, indico una fuente del gobierno. “No hay acuerdo en torno a eso”, apuntó.
Según un funcionario, en la propuesta del PSOE los ministerios son “decorativos” porque actuarían como una “caja de herramientas vacía”, ya que no contarían con las atribuciones necesarias para que Unidas Podemos aplique sus políticas.
“Podemos no quiere entrar en el Gobierno a cualquier precio, queremos competencias para desarrollar políticas sociales en Igualdad, Trabajo, Hacienda y Transición Ecológica. Y con las ofertas que nos están haciendo no es posible”, indicó un mensaje del partido a la prensa.
Durante la jornada, Pablo Echenique, jefe negociador de Podemos, mantuvo una reunión con la vicepresidenta saliente, Carmen Calvo, después de que la izquierda denunciara que se le vetaron los llamados ministerios de Estado, Exteriores, Interior, Justicia y Defensa, además de la presencia de su líder, Pablo Iglesias.
Además de las competencias en áreas sociales, Podemos quiere una vicepresidencia, que podría recaer en Irene Montero, número dos del partido y pareja de Iglesias.
En la votación de este jueves, a Sánchez le bastará una mayoría simple para ser investido, pero con solo 123 diputados socialistas en la cámara baja de 350 escaños, necesita sumar el sí de los 42 diputados de Podemos.
De resultar infructuosa la votación de este jueves, el rey de España realizará una nueva ronda de consultas entre los partidos políticos para decidir si vuelve a proponer un candidato a la investidura o si, por el contrario, convoca a nuevas elecciones.