BERLÍN.- El ministro alemán del Interior, Horst Seehofer, aseguró que todos los problemas políticos que atraviesa el continente europeo en la actualidad se deben a la migración, un tema que siempre dividió al bloque pero se agudizó tras el caso del barco Aquarius en junio del año que corre.
«La cuestión migratoria es la madre de todos los problemas políticos en este país. Lo llevo diciendo desde hace tres años (…) muchas personas relacionan ahora sus preocupaciones sociales con la cuestión migratoria», afirmó durante una entrevista publicada hoy por el diario Rheinische Post.
Seehofer hizo referencia a las manifestaciones en el estado federado de Chemnitz, tras la muerte a cuchilladas de un hombre de 35 años, presuntamente a manos de solicitantes de asilo.
«Entiendo que haya una agitación e indignación en la población por este homicidio. Si no fuera ministro, como ciudadano yo también habría salido a la calle, naturalmente no con los radicales», afirmó y luego condenó los actos violentos perpetrados por seguidores de Alternativa para Alemania (AfD) que protagonizaron la convocatoria.
«Ya ahora en Sajonia casi no hay una opción de gobierno sin AfD o La Izquierda. Esa no es una situación aceptable. No queremos a estas fuerzas en ningún gobierno», declaró.
Ante la versión de que un inmigrante ilegal iraquí fue el culpable del asesinato, Seehofer explicó que de haberse aprobado el reglamento que él propuso a principio de año, por el cual fue criticado, el sujeto no habría entrado en el país y no estarían lamentando el fallecimiento.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, quien es la principal enemiga del ministro respecto a este tema, salió al cruce y descartó que la situación sea como la plantea Seehofer más bien «les presenta nuevos desafíos» con problemas a resolver.
En relación al conflicto de Chemnitz, la canciller en vez de criticarlo dijo que «es un ambiente tenso en el que todos, creo, deberían adoptar posiciones», y se debe encontrar una solución política.