QUITO.—Ecuador anunció que seguirá implementando cortes de electricidad a nivel nacional durante esta semana, con una duración de hasta 14 horas diarias, la medida más restrictiva hasta la fecha ante la peor sequía registrada en 60 años.
Sin embargo, el presidente Daniel Noboa expresó confianza en que los cortes podrían finalizar en diciembre. «Si todo se desarrolla según lo previsto, aunque son solo proyecciones y probabilidades, el problema debería estar resuelto para diciembre», comentó Noboa en una entrevista con el canal TC.
El presidente destacó que, gracias a las medidas ya implementadas y otras en proceso, como el envío de turbinas aéreas con ayuda de Estados Unidos y Perú, se espera que para diciembre no haya más apagones.
El Ministerio de Energía indicó este domingo que, debido a las condiciones climáticas, los horarios de racionamiento continuarán siendo similares a los de días recientes, con bloques de entre 10 y 14 horas diarias, ajustados según las necesidades de cada región del país. El ministerio añadió que la programación de los cortes se ajusta técnicamente para garantizar la seguridad y estabilidad del Sistema Nacional Interconectado.
La sequía ha reducido considerablemente los embalses de las hidroeléctricas que abastecen el 70 % de la demanda energética del país, lo que llevó a Ecuador a imponer racionamientos temporales, como en abril, cuando se registraron apagones de hasta 13 horas diarias.
Esta fase de racionamientos ha estado en vigor por un mes y, desde el pasado viernes, los apagones se extendieron de ocho a 14 horas diarias, siendo la restricción más severa hasta ahora. El sector empresarial ha señalado que cada hora sin electricidad representa pérdidas de aproximadamente 12 millones de dólares.
Ecuador, con una población de 17 millones, requiere cerca de 4,600 MW de electricidad, enfrentando actualmente un déficit de 1,600 MW. El domingo, el Congreso aprobó una propuesta del gobierno para fomentar la inversión privada en la generación de energías limpias, facilitar la importación de gas natural para producir electricidad y sustituir otros combustibles en el sector productivo.
La crisis energética también se ha agravado por la falta de inversión en los últimos años en un sector administrado exclusivamente por empresas públicas. Ecuador es una de las nueve naciones amazónicas, algunas de las cuales también sufren graves consecuencias debido a la escasez de lluvias sin precedentes en la región.