LONDRES.— Los laboristas lograron una victoria aplastante el jueves en las elecciones legislativas británicas, que pondrá fin a 14 años de gobiernos conservadores y abrirá una etapa de «cambio», afirmó su líder, Keir Starmer, próximo primer ministro.
Las primeras estimaciones de las televisiones británicas, tras sondeos a pie de urna, otorgaban a los laboristas 410 de los 650 escaños de la Cámara de los Comunes, con una holgada ventaja sobre los conservadores del primer ministro Rishi Sunak, castigados por los votantes, que obtendrían 131.
Si se confirma esta cifra, sería el peor resultado conservador en unas elecciones desde la fundación del partido en 1834, por debajo de los 156 logrados en 1906, su anterior peor registro.
Mientras continúa la madrugada del viernes el recuento de votos, los laboristas se aseguraron la mayoría absoluta, para lo que se necesitaba llegar a 326 escaños, después de alcanzar la cifra de 340 disputados.
«Los votantes han hablado y están listos para el cambio, para poner fin a la política de espectáculo y volver a la política como un servicio a la ciudadanía», declaró Starmer, de 61 años, en un discurso tras su reelección como diputado en su circunscripción del norte de Londres.
«Nos corresponde a nosotros cumplir nuestras promesas», añadió Starmer, que dará sus primeros pasos en la escena internacional la próxima semana en una cumbre de la OTAN en Washington.
La formación de extrema derecha Reform UK, de Nigel Farage, uno de los impulsores del Brexit, haría su entrada en el Parlamento, con 13 escaños, aunque otras estimaciones colocaban su presencia en un número menor, quedando detrás del Partido Liberal Demócrata (centro), que obtendría 61, según las primeras estimaciones.
«La revuelta contra el ‘establishment’ está en marcha», dijo Farage, de 60 años, que logró el escaño de diputado en su octava tentativa, en la red social X.
Por su parte, los independentistas escoceses, terceros en las elecciones de 2019, sufrirían un duro revés con diez escaños ganados en las 57 circunscripciones en que concurrían.
Si las estimaciones se cumplen, Starmer no superaría el récord de diputados laboristas (418), obtenido por Tony Blair en 1997, cuando puso fin a 18 años de gobiernos conservadores.