MOSCÚ.— El recuento de menores fallecidos en el atentado terrorista del pasado 22 de marzo en el Crocus City Hall, ubicado en las afueras de Moscú, ha aumentado a seis, según los últimos informes proporcionados por la defensora de los Derechos del Niño de Rusia, María Lvova-Belova.
El 30 de marzo, el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso informó que, de las 144 víctimas mortales, cinco eran niños.
«Actualmente, contamos con información sobre seis niños fallecidos y siete heridos. Dos están recibiendo tratamiento en casa. Cinco están hospitalizados, dos de ellos en estado crítico y tres en estado de gravedad moderada», expresó Lvova-Belova durante una conferencia de prensa.
La defensora rusa también afirmó que está supervisando de cerca la situación de los menores heridos, visitándolos regularmente y manteniendo contacto con los médicos. «Los niños están recibiendo todo el apoyo necesario. Los pronósticos médicos son alentadores y esperamos una pronta recuperación después de la rehabilitación», añadió.
Según los últimos datos proporcionados por la defensora, el atentado terrorista en el Crocus City Hall provocó la muerte de 144 personas, incluyendo a seis niños, y dejó un saldo de 551 heridos.
El 22 de marzo, un grupo de hombres armados abrió fuego contra una multitud reunida para un concierto de rock en el Crocus City Hall, incendiando el recinto.
Hasta el momento, en Rusia han sido detenidos 16 presuntos implicados, incluidos los cuatro atacantes responsables del tiroteo en el Crocus City Hall. De estos, diez ya han sido colocados bajo prisión preventiva. Además, nueve personas sospechosas de tener vínculos con los autores del atentado fueron detenidas en Tayikistán.
El ataque terrorista al Crocus City Hall es el más mortífero ocurrido en Rusia en casi 20 años.